En la práctica sanitaria diaria, los cuidados de posicionamiento adecuado no son sólo una tarea básica de enfermería sino una medida terapéutica crucial y una estrategia de prevención de enfermedades. Recientemente, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) emitieron nuevas pautas que enfatizan elevar la cabecera de la cama del paciente entre 30° y 45° para prevenir la neumonía asociada al ventilador (VAP).
La NAV es una complicación importante de la infección adquirida en el hospital y a menudo ocurre en pacientes que reciben ventilación mecánica. No sólo prolonga las estancias hospitalarias y aumenta los costes del tratamiento, sino que también puede provocar complicaciones graves e incluso la muerte. Según los últimos datos de los CDC, la atención en el posicionamiento adecuado reduce significativamente la incidencia de NAV, mejorando así la recuperación del paciente y los resultados del tratamiento.
La clave para la atención de posicionamiento es ajustar la postura del paciente para facilitar una mejor respiración y expectoración y al mismo tiempo minimizar el riesgo de infecciones pulmonares. Elevar la cabecera de la cama a un ángulo superior a 30° ayuda a mejorar la ventilación pulmonar, reduce la probabilidad de que el contenido oral y gástrico refluya hacia las vías respiratorias y previene eficazmente la NAV.
Los proveedores de atención médica deben monitorear de cerca el cuidado del posicionamiento en la práctica diaria, especialmente para pacientes que requieren reposo prolongado en cama o ventilación mecánica. Los ajustes regulares y el mantenimiento de la elevación recomendada de la cabecera de la cama son medidas preventivas cruciales contra las infecciones hospitalarias.
Los CDC instan a todas las instituciones y proveedores de atención médica a adherirse estrictamente a las mejores prácticas para posicionar la atención para mejorar la calidad de la atención médica y salvaguardar la salud y seguridad del paciente. Estas pautas se aplican no solo a las unidades de cuidados intensivos sino también a otros departamentos médicos y centros de enfermería, lo que garantiza una atención y un apoyo óptimos para cada paciente.
Conclusión:
En la práctica de enfermería, seguir las pautas de los CDC sobre el posicionamiento de la atención es un paso fundamental para garantizar la seguridad y la recuperación del paciente. Al elevar los estándares de enfermería e implementar medidas científicas de prevención, podemos reducir colectivamente el riesgo de infecciones adquiridas en hospitales y brindar servicios de atención médica más seguros y eficaces a los pacientes.
Hora de publicación: 11-jul-2024